COMPRAR TÍTULO NOBILIARIO (II)

 

 

Comprar título nobiliario ha sido una práctica que fue históricamente conocida en España durante el Antiguo Régimen, tal y como señalábamos en anteriores entradas dedicadas a ello bajo el epígrafe comprar título nobiliario. El hecho de comprar título nobiliario fue acogido siempre con extrema excepcionalidad, en casos poco frecuentes. No obstante, el comprar título nobiliario contaba, en estos supuestos, con la pertinente autorización por parte del Rey.

En una entrada anterior, analizamos desde un punto de vista jurídico la cuestión de comprar título nobiliario, así como la de su no cabida en el ordenamiento jurídico actual. Al mismo tiempo, ofrecimos una serie de ejemplos históricos que ilustraban situaciones reales de compras de títulos nobiliarios que gozaron de la autorización real para su perfección.

En esta ocasión, no queremos perder la oportunidad de poner de manifiesto una peculiar situación de venta de un título nobiliario mediando autorización real, haciéndolo de modo que quede singularizado, pues no creemos usual ni frecuente que una dignidad nobiliaria pueda experimentar tantas y tan curiosas vicisitudes a lo largo de su vida.

El título nobiliario de Conde de Chinchón fue concedido el 9 de mayo de 1520 por Carlos I a D. Fernando de Cabrera y Bobadilla. Siguió transmitiéndose mortis causa por vía hereditaria hasta el año 1738, en que Felipe V autorizó a su poseedor, D. José Sforza Cesarini y Conti, Duque de Genzano y Conde de Santa Flora, a venderlo a su propio hijo, el Infante D. Felipe de Borbón.

El Infante D. Felipe, además de hijo de Felipe V, lo era también de la segunda esposa de éste, Isabel de Farnesio. Con motivo de la Guerra de Sucesión de Austria, en la que España tomó parte beligerante a partir de 1741, Felipe V envió sendos ejércitos expedicionarios a Italia para conquistar el Milanesado y los dominios de Parma, Piacenza y Guastella, que habían pertenecido a los Farnesio. Uno de ellos estaba bajo el mando del Duque de Montemar, y el otro a las órdenes del Infante D. Felipe. Tras una exitosa campaña, tras victorias como la de Camposanto (1743), la Paz de Aquisgrán de 1748, Parma, Piacenza y Guastella quedaron bajo el dominio de Felipe, que se convirtió soberano de los mismos con el título de Duque, fundando la Casa de Borbón-Parma.

 
Felipe, Duque de Parma de 1748 a 1765, vendió el título nobiliario de Conde de Chinchón a su hermano, el Infante D. Luis Antonio de Borbón, tras haberlo comprado anteriormente al Duque de Genzano
Así las cosas, en 1761, Felipe vendió el título nobiliario de Conde de Chinchón, con autorización de Carlos III, a un hermano suyo, el Infante D. Luis Antonio de Borbón, más tarde Arzobispo de Toledo.

 

Bajo el cumplimiento de determinadas normas y únicamente en ciertos casos, es posible en la actualidad obtener pronunciamientos de los tribunales respecto de títulos nobiliarios.

Para conocer las posibilidades que tiene de obtener un título nobiliario feudal puede dirigirse a nosotros a través de la sección de contacto de nuestra página web.